“Mi padre es un acaparador. Si alguna vez cae en esa casa, nadie lo encontrará sin un perro de rescate”. Donna está medio riendo, medio llorando mientras describe la casa en la que su padre vivió sola desde que su madre falleció hace cinco años.
“No fue tan malo cuando solo era el cobertizo de almacenamiento. Luego llenó el garaje con sus cosas. Ahora no puedes entrar a ninguna de las habitaciones, y la cocina será la siguiente en llegar. No lo he hecho. He visto el comedor en dos años. Duerme en su sillón reclinable reformas baratas San Sebastian de los reyes .
“Mamá estaba limpia como un alfiler. Sería devastada ver lo que le sucedió a su casa”.
El padre de Donna siempre fue un coleccionista. Ahora que su esposa ya no está aplicando las reglas de la casa, su inclinación ha pasado de ser una “recolección seria” a ser “acaparada”. Ya no puede tirar nada, parece estar emocionalmente apegado a cada cosa sin tener en cuenta su valor real. La sola idea de deshacerse incluso de un periódico viejo lo trastorna enormemente.
Donna siente la responsabilidad de cuidar la salud y el bienestar de su padre de 82 años. Ella alterna entre enojo y desesperación mientras le preocupa si puede encontrar su medicación, si puede entrar al baño de manera segura, y el peligro de tropezar con algo y romperse la cadera.
Donna dice que su padre todavía parece estar manejando su dinero bastante bien. Él no parece ser inusualmente olvidadizo o confundido. Con la excepción de su excéntrica necesidad de reunir y mantener todo lo que parece estar manejando. Ella le pide consejo sobre si ella y su hermano deberían simplemente estacionar un contenedor de basura fuera de la casa y retirar a la fuerza las bicicletas viejas y acumuladas, las piezas del automóvil, la ropa, los periódicos y una variedad de “cosas”.
Los niños mayores a menudo preguntan cómo pueden “hacer” que sus padres arrojen enormes pilas de basura obvia. Algunos incluso recurren a la primera oportunidad de limpiar la casa sin permiso si sus padres están hospitalizados o lejos de casa.
Tentador, como debe ser el impulso de limpiar el alijo de un acaparador, tenemos que decir: “No, traer el contenedor de basura probablemente no sea una buena idea”.
No solo es ilegal eliminar las pertenencias de otra persona, raramente será efectivo. Un acaparador simplemente trabajará muy duro para hacer que las cosas vuelvan a lo que se siente normal y cómodo tan pronto como sea posible. Tan cierto como que el día sigue a la noche, el desorden y la acumulación pronto volverán a estar en su lugar. Un acaparador no puede ser forzado a cambiar. El cambio solo ocurrirá si y cuando un acaparador está listo. Discutir o suplicar no será productivo. De hecho, el argumento generalmente solo conduce a más argumentos y mayor hostilidad.
Aunque puede no ser completamente seguro o higiénico, todos los adultos legalmente competentes tienen derecho a vivir como lo elijan siempre que sus hábitos no creen una molestia pública o un riesgo para la salud.
Sin embargo, si sus condiciones de vida ponen a acaparadores más viejos en peligro inminente de daño, a veces las autoridades pueden intervenir o al menos ofrecer asistencia. Una vez en una luna azul, un acaparador más viejo aceptará ayuda con el desorden y la limpieza. Si bien esto es raro, puede valer la pena intentarlo si se cumple alguna de las siguientes condiciones:
o No hay agua
o El inodoro y la ducha / bañera no se pueden alcanzar con seguridad o no funcionan
o Hay violaciones obvias del código de fuego
o Las salidas (puertas y ventanas) están bloqueadas
o Hay roedores, insectos y signos de desechos animales
o Hay comida estropeada o infestada
o Hay olores fuertes
o Los electrodomésticos de cocina no se pueden usar de manera segura o no funcionan
o Las tomas de corriente están bloqueadas o sobrecargadas
o El horno no funciona o los conductos de calefacción están bloqueados
Si conoce a un acaparador experimentado que vive en condiciones que considera inseguras y no ha progresado, informe a su organización local de servicios de protección para adultos, el departamento de bomberos y el departamento de salud pública. En ocasiones, la participación de un funcionario externo será el catalizador. Estas organizaciones a veces pueden convencer a un acaparador de hacer cambios que la familia ha estado tratando de hacer durante años.
Sin embargo, si las condiciones del hogar no parecen ser extremadamente peligrosas, incluso estas agencias se limitan a la ayuda voluntaria. No pueden obligar a un adulto legalmente competente a dejar de acumular comportamientos o mantener una casa ordenada.
Pero, nada se arriesgó, nada ganó. Si haces un informe, las autoridades deben investigar. Algunas agencias reciben informes regularmente sobre el mismo individuo. Después de varias visitas, que deben realizar cada vez que se recibe un nuevo informe, se sabe que las personas mayores finalmente aceptan ayuda. Incluso los pequeños pasos en dirección a la ordenación son importantes cuando se trata de un acaparamiento bien arraigado.